Activar el modo creativo
Viendo en el último Redes la entrevista que le hizo Eduard Punset a Sir Kenn Robinson (del que ya hablé en otra ocasión) me han entrado ganas de volver a tocar el tema de la creatividad. Le he dedicado varios post desde diferentes vertientes y hoy me gustaría centrarme en la parte más cerebral del tema, en lo que se me ha ocurrido denominar el «modo creativo«. No es que exista un modo cerebral exclusivo y específico de la creatividad, pero algunas acciones y actitudes pueden hacer que esta se dispare de un modo considerable. Porque voy a partir de la base, como hace Robinson, de que todos somos creativos y creadores pero en ocasiones necesitamos saber cómo entrenarlo. Muchos años de educación formal, especialmente la seguida en la escuela, han constreñido nuestra mente a un modo de pensamiento racional abstracto que hace que no salgamos mucho del camino marcado. Y ese camino no acostumbra a ser especialmente creativo.
Hace poco hablaba de estar en foco. Estar enfocados en algo nos sirve para ser productivos, para como se dice vulgarmente «sacar faena». También nos sirve para recopilar toda la información que precisemos sobre un tema, para tener una buena base de información y conocimientos. Y son pasos necesarios, pues para crear con sentido (Robinson define la creatividad como el hecho de crear algo de valor) tiene que existir una base. Pero ese estar enfocados no es el modo ideal de ser creativos. Cuando estamos muy concentrados en una tarea, pero no en flujo, sino de manera racional, están activados los sistemas noradrenérgicos y estos nos permiten rendir pero no son los ideales para crear. Para crear algo nuevo o diferente, o para ir un paso más allá en alguna cuestión, necesitamos conectar con la parte inconsciente y con la parte emocional de nuestro cerebro. Necesitamos un paso previo para estar realmente creativos, que es el de estar con la atención difusa,el de dejar la mente vagar por diferentes ideas, establecer asociaciones y permitir así que con todo ese material inconsciente (que no es lo mismo que inaccesible) emerja lo creativo. Porque la idea, no la buscamos conscientemente, sino que emerge de manera inconsciente cuando es el momento apropiado.
Voy a ver si lo puedo aclarar un poco más. Como ya he explicado en otras ocasiones, la intuición según la definen investigadores como Antonio Damasio, es la condensación, a un nivel no consciente, de múltiples razonamientos e informaciones que reúnen emoción y razón. No es algo que surja de la nada. Pero no surge a voluntad. La intuición es un pozo de creatividad pero hemos de permitir que se manifieste y en eso consiste, en cierta manera, el activar el modo creativo.
Voy a explicar algunas maneras, más o menos simples de ponernos en ese modo creativo, siempre que estés dispuesto a probar y atreverte con cosas nuevas:
– Date tiempo. No siempre se puede tener la idea ya, en este mismo momento. Hay que dejar que madure en el momento adecuado, la presión sólo hará que bloquearte.
– Recuerda por lo dicho que una de las fases para entrar en ese modo creativo es permitirte estar con la atención flotante. Una vez hayas recopilado la información que necesitas para el tema en el que estés, deja que tu atención divague libremente, sin centrarte en esa información.
– También puedes poner un encargo a tu cerebro y ponerte en otra cosa. Ya tienes la información y sabes más o menos por dónde ha de ir la respuesta aunque aún no la tengas. Deja eso ahí y permite a tu inconsciente trabajar en ello mientras tu haces otras cosas. Si es algo urgente, no será un buen sistema. Pero muchas veces las cosas no son tan urgentes como pretendemos. Esta técnica requiere confianza en tus propios procesos mentales, pero si no confías tu en tu cerebro…..
– No reniegues de las asociaciones que se vayan produciendo por el camino aunque te parezcan sin sentido. Tirando de esos hilos puedes hallar respuestas sorprendentes.
– Cambia de entorno, ve a dar un paseo, lee una novela, mira fotografías, mira una película…Cualquier cosa que te aleje del «problema» te facilita el modo creativo. Es más fácil desde esa relajación en que la atención esté flotante que surja la respuesta que buscas. Ir a un lugar que te resulte inspirador también puede ser útil.
– Cuando percibas un asomo de respuesta, toma nota. La respuesta que estás buscando puede venir de un tirón o hacerlo en pequeños flashes. Si son sólo flashes no los fuerces, aún no es el momento. Pero si se presenta de un tirón (es algo que se siente, no hay una forma de explicarlo) déjate fluir. Te sorprenderá de cómo sale toda la información necesaria.
Confieso que la mayoría de los post los escribo de esta manera. Por eso sé cómo empiezan pero nunca sé dónde terminarán. Y suelo tener que releerlos para saber qué es lo que realmente he explicado en ellos. A veces eso no ocurre y sólo hay flashes y entonces quedan anotados en una libreta esperando su momento.
Hay muchas técnicas para lograr ese efecto, ese modo creativo, pero creo que como idea general para ir practicando, este método puede ser muy útil. Y además empiezas a explorar una parte de tu mente que tal vez no uses muy frecuentemente ( o tal vez sí, quien sabe). En cualquier caso es un buen método para aprovechar más el potencial de nuestro cerebro y lograr poner esfuerzo en lo que realmente lo necesita y relajación en dónde es más adecuado ese estado.
Me gustaría acabar con las palabras de Joseph Zinker: La intención creativa es un anhelo en el propio cuerpo, un deseo de llenar el recipiente de la vida, anhelo que se expresa en energía, movimiento y ritmo. La actividad de crear y su expresión son una afirmación amante de la vida.
¿Te consideras creativo? ¿Usas alguna técnica?
Si quieres escuchar el post en formato podcast clicka en el reproductor:
Mertxe Pasamontes
Comments
Siempre he dicho y mantenido sobre mí mismo que «Tengo la Creatividad en el Culo», con perdón de la expresión, pero me considero nulo en creatividad. Tengo muy desarrollado el uso del razonamiento lógico, pero nada creativo. Supongo que por mi formación, o porque nunca he trabajado mi parte creativa quizá porque de pequeño siempre me dijeron que era nulo para el dibujo artístico (no sé si eso tuvo algo que ver).
Volveré a leer los puntos que comentas y quizá pueda aplicar alguno.
Gracias de nuevo!
Hola Antonio
Esa es una de las consecuencias de la escuela, dividir a los niños en creativos y no creativos en función de alguna habilidad como el dibujo artístico. Pero la creatividad va mucho más allá que dibujar bien o no. Y eso es lo que no nos contaron. Y aunque no lo parezca, los números también puede ser muy creativos, pero se empeñan en que todo lo hagamos siguiendo unos parámetros lógicos….. Así nos luce!
Buenos días,
Yo de pequeño era altamente creativo, pero la vida me ha demandado mucho más centrarme en ser productivo, con lo cual esa parte creativa ha quedado latente y dormida en mí.
Cuando he precisado puntualmente tirar de ella sólo he tenido que dejarla fluir sin presión de ningún tipo, y estoy muy convencido de que lo que se llama inspiración o musa no es más que eso, relajar la mente y dejar que las ideas se desborden por si mismas, como el agua de un arroyo. Es una sensación agradable que te excita (más bien «te activa») y te relaja (te alivia o destensa) al tiempo.
No soy capaz de aplicar unas reglas de juego, para mí es algo creado por la naturaleza para ser errático, y precisamente eso es lo que hace que la creatividad sea el alma mater del arte. Y por eso mismo el buen arte es algo tan personal, que parte de relajar la mente, tan distinta en cada uno de nosotros.
Interesante lo que dices sobre la voluntariedad, Mertxe… Porque pienso que esa es la cuestión, aunque como todo en psicología no sea inmediato pero es el primer pasito para crear una rutina, ya que somos animales de costumbres auto- y/o hetero-educadas.
Paralelo a esto, me ha dado por pensar que si la poca autoestima o estados depresivos están relacionados con una pobre creatividad??? Y si eso hace intervenir a otras neurotrasmisores más anímicos como la serotonina u otras sustancias neuromoduladoras como las endorfinas…
@gallego_antonio:
Es posible que no seas capaz de reflejar lo que ves o imaginas, pero eres igual de creativo si tienes visión espacial y eres capaz de visualizar en tu imaginación un proyecto a desarrollar.
Puedes ver un solar y visualizar mentalmente cómo emplazarías en él un parque o una catedral, y cómo te gustaría que fueran. Eso es creatividad.
Creo que la creatividad se nutre de la curiosidad intelectual. De ese deseo de conocer, que se ve tan claro en los niños pequeños. Y es como una adición. Cuanto más lees, ves, reflexionas, escuchas, más deseos de saber tienes. Y en mi experiencia todos esos estímulos que recibimos se van mezclando en nuestra cabeza sin darnos cuenta y se manifiesta, sin proponernos ser creativos, charlando con un amigo, ecribiendo, o fantaseando en soledad etc.
Ahora bien, lo que me parece también, es que luego a la chispa creativa hay que añadirle trabajo para llegar a crear algo concreto.Con ser creativo y tener ideas maravillosas no basta. Hay que ponerse a sudar.
Me vienen a la mente las frases de 2 genios creativos Einstein: «1%inspiración; 99%trabajo» o Picasso “La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando”.
Besosssss Mertxe como me gusta seguirte, me hace bien al espíritu.
De nuevo excelente Mertxe!
Me resultan de mucha utilidad tus consejos en materia de creatividad (y en otros temas también, of course!) y además, coincido con muchas de tus apreciaciones, sobre todo en esto de «dejarte fluir».
Gracias
LuisK
releyendo los comentarios aquí expresados, quisiera agregar lo siguiente:
Pienso que todos tenemos algo de creativos, unos más, otros menos, pero existe en cada uno de nosotros. Y como todo en la vida, en la medida que usemos nuestros «talentos», los veremos desarrollarse y expandirse.
Así, si deseas desarrollar tu vena creativa, digamos que escribiendo artículos, entonces, simplemente tienes que ponerte en ello y dejar de inventar excusas para no hacerlo («… es que no se escribir…», «… y de qué voy a escribir???…») simplemente, ponerse como meta escribir «x» cantidad de texto cada tanto tiempo y hacerlo llueva, truene o relampaguee, y verás cómo, al cabo de muy poco tiempo, se abren las compuertas de esa represa que retiene tus ideas y todo comienza a fluir.
Por otra parte, coincido plenamente con lo dicho aquí por vosotros que no basta con sentarse a dejar fluir ideas, sino que hay que poner manos a la obra y utilizar esa otra parte que es el enfoque; de lo contrario, todo quedará en el etéreo, en el lugar de las buenas ideas que nunca llegaron a ser.
Genial este intercambio de «ideas» 🙂
Feliz día a todos y mejor semana!
LuisK
Leyéndote me doy cuenta que soy de las personas que pongo en marcha la idea antes de haberla madurado, claro entonces normalmente no consigo llevarla a cabo, pero quizás no soy
lo suficientemente paciente para esperar a que esta idea este madura en mi cerebro pero veo difícil trabajarme este espacio de mi personalidad, soy muy impulsiva.
Hay un punto en el que deseo dar otra versión….
Cuando hablamos de urgencias en creatividad como no positivas, nos deberíamos referir mas a la necesidad de tiempo para incubar, que a la misma urgencia, porque existen experiencias que demuestran que la creatividad se produce en grado superior en momentos de estres que incita un aumento en la producción de adrenalina, y por ende, mayor capacidad para el flujo de ideas. La urgencia en uno de los detonantes que producen estres.
Es sabido en los entornos estrictamente creativos , sobretodo en publicidad que el ULTIMO MINUTO es el momento mas creativo, tanto es así que la mayor parte de las campañas son «paridas» en ese periodo de tiempo que incluso pone en dificultades para poder plasmar la idea en el medio a presentar. Y son muchos los concursos en los que se presentan importantes campañas con layauts a medio realizar.
Muy bien puesto Eduard y coincido con tu apreciación.
Ahora bien, en esos casos creo que lo importante es no bloquearse. Habemos quienes en momentos de alta presión, nos bloqueamos y no pensamos con claridad y al permitir el bloqueo, imposibilitamos el fluir de la creatividad.
El punto está en ¿cómo desbloquearnos? creo que allí Mertxe, con su experiencia, nos podría aportar algunas ideas y consejos… 😉
Los casos que comentáis de trabajar bajo presión, no los veo recomendables. Siempre distinguiendo una cierta ansiedad que puede resultar estimulante y motivadora, del estrés agobiante. Se corre el riesgo como bien dice Luis de bloquearse o de hacer algo que «parece bueno» pero que está muy por debajo de lo que podríamos haber hecho pero ante la urgencia, rebajamos inconscientemente el nivel de exigencia). Lo que si que puede suceder es que haya algún estado interno que se nos activa en los momentos de presión y nos ayuda a crear. La gracia estaría en detectar ese estado y aprender a activarlo sin necesidad de la presión. Nuestro cuerpo lo agradecerá (el cortisol del estrés puede llegar a ser muy dañino).
Al igual que la IE(inteligencia emocional) el desarrollo de la creatividad,es un factor clave para calar con exito los escenarios que depara el presente siglo.Me identifico con Tony Buzán con el aprendizaje irradiativo, donde la creatividad se desarrolla en forma natural.Mal nuestra educación que no nos permite desarrollar el hemisferio derecho, donde se encuentra el musculo de la creatividad,hay que tratarlo de activarlo, reanimarlo se dice que una forma sencilla de hacerlo es todo lo que se hace con la mano derecha hay que hacerlo con la mano izquierda,se tiene logros sorprendentes en cuanto a la creatividad.Felicitarle por la excelencia temática de sus post y la forma como lo explica.Un saludo desde Huamachuco-Perú.
Estoy de acuerdo con lo expuesto en el articulo, yo entro en modo creativo con bastante facilidad los domingos por la noche, porque ése día me he levantado tarde y no tengo sueño, pero me voy en la cama igualmente. Como no duermo, pero no ocupo mi mente con algo concreto, empiezo a divagar, una idea empieza a tirar de otra y al final me tengo que levantar corriendo a por una libreta al grito de Eureka!! 🙂
En cuánto a lo comentado sobre creatividad en momentos de estress también lo he experimentado, hace varios años trabajaba en un almacén y teníamos una hora punta de mucho trabajo, que a veces se desbordaba. Si ése día estaba de muy buen humor y dejaba a mi cuerpo trabajar rápido en modo autónomo, sin dejarme preocupar por las urgencias e incluso me divertía yendo de un lado a otro corriendo, empezaba a encontrar soluciones creativas, eso si, siempre a los sujetas a los problemas concretos en ese marco.