Cómo fortalecer el coraje
En el anterior post ya comenté que a veces en la vida nos encontramos en situaciones difíciles, en las que tal vez lo único que marcará una diferencia es nuestra actitud interna con respecto a ellas. El coraje (que sería una forma de resiliencia) es esa cualidad que nos permite enfrentarnos a esa situación, esa capacidad de creer que somos capaces de salir del atolladero en donde nos encontremos. Es ese valor positivo que nos lleva a resistir ante una determinada situación cuando lo primero que nos pide el cuerpo es huir, o bien a reaccionar cuando nos hemos quedado paralizados por el temor. A veces puede ser algo visible para los demás y otras puede ser simplemente una actitud interna.
Lo primero para saber cuándo es necesario sacar «el coraje» de nuestro interior es hacer un buen análisis de la situación. Hay que ser capaces de discernir cuando es bueno resistir y cuando es mejor abandonar. Resistir por resistir puede llevar a una obcecación sin sentido que sólo nos conduzca a desgastarnos y a agotar toda nuestra energía.
Pero si hemos decidido que vamos a aguantar, es importante también no confundir el coraje con la agresividad. A veces uno aguanta «por rabia» y eso conduce de nuevo a una situación de poco discernimiento, a un agotamiento de nuestros recursos.
Y si ya hemos decido resistir ¿cómo podemos hacer para fortalecer nuestro coraje?. Vamos a dar algunas pistas:
– La primera es borrar de la mente la idea de que la situación nos ha vencido. Como dijimos en el anterior post, hay que centrar la atención en lo que queremos y en los recursos de los que disponemos para conseguirlo. Y si no los encontramos de primeras, hay que insistir. Para encontrar recursos hay muchos modos, uno puede ser el Método creativo de Disney.
– Puedes utilizar algunos mecanismos puramente físicos: pararte y respirar profundamente, crearte un anclaje de fuerza interior, controlar los nervios…
– En las situaciones cotidianas, puedes tratar de marcarte pequeños retos o incomodidades que fortalezcan tu coraje: hacer una serie de ejercicios físicos que te cuesten de manera regular, ducharte con agua fría, levantarte 15 minutos antes e ir dar un paseo, etc…Se trata básicamente de entrenar una cierta incomodidad y una disciplina. Es posible que necesites esa disciplina para resistir en momentos difíciles.
Sabemos que es estupendo fluir y dejar que las cosas sucedan sin esfuerzo, pero a veces la vida no nos lo pone fácil y gana no el más fuerte, sino el que más resiste.
A veces sólo se trata de dar un primer paso…
¿Crees que eres una personas con coraje? ¿Te pones algún reto para superarte a ti mismo?
Mertxe Pasamontes
Comments
Guau el vídeo pone los pelos de punta. La verdad es que no sólo debemos tener coraje ante situaciones críticas, creo que el día a día es una lucha constante y debemos tener el coraje de afrontarlo con decisión. Yo lo intento, pongo todos mis esfuerzos. Así te sientes mejor.
Gran post Mertxe. Un beso.
.-= Ahora mismo, en el blog de Esther Gómez: Historia de una… ¿emprendedora? ¿apasionada? =-.
Cierto, yo también me he erizado, jeje, emocionante!
Me encanta este video, me recuerda muchas vivencias…PRECIOSO!!!
A mi también! 🙂