Cuestionarse a uno mismo

Para acabar con esta serie de Reflexiones veraniegas, me gustaría hacer mención a lo que un antiguo cuento de la India nos explica:
En compañía de uno de sus acólitos, el diablo vino a dar un largo paseo por el planeta Tierra. Habiendo tenido noticias de que la Tierra era terreno de odio y perversidades, corrupción y malevolencia, abandonó durante unos días su reino para disfrutar de su viaje. Maestro y discípulo iban caminando tranquilamente cuando, de súbito, este último vio una partícula de verdad. Alarmado, previno al diablo:
–Señor, allí hay una partícula de verdad, cuidado no vaya a extenderse.
Y el diablo, sin alterarse en lo más mínimo, repuso:
–No te preocupes, ya se encargarán de institucionalizarla.
He escogido este cuento, porqué en realidad todos estos post de reflexiones veraniegas no tienen otro fin que ayudarte a que te cuestiones a ti mismo. Pero a que lo hagas de verdad. En ocasiones vemos a personas que dicen haber cambiado su vida. Suele pasar después de un acontecimiento vital importante e impactante, muchas veces una enfermedad, un accidente, la muerte de una persona querida…. Cambian de profesión, de lugar de residencia, se visten de otra manera, hacen nuevos amigos….pero algunas veces todo eso es sólo externo, pues los patrones de pensamiento mental, siguen siendo los mismos. Se ha cambiado el envoltorio y durante un tiempo, puedes creer que ha cambiado el interior. Pero eso no ha sucedido. Y ese cambio interior es el único que de verdad cuenta. Puedes seguir en el mismo trabajo, en la misma casa, con los mismos amigos y ser una persona completamente diferente. O puedes cambiarlo todo y ser el mismo.
En general, y ese es el motivo de estas reflexiones que he ido realizando, es más fácil cuando cambias también aspectos externos, ya que te ayudan a romper hábitos y anclajes, en ocasiones muy arraigados. Pero si todo eso no va acompañado de una verdadera reflexión y conexión interior, es sólo «perfumería». No has cambiado nada y tus antiguos patrones de pensamiento y conducta irán surgiendo de manera disimulada, se irán colando en tu «nueva vida».
Hacer ese trabajo interior no es fácil. Requiere coraje y atreverse de verdad a abandonar creencias que tal vez te han acompañado toda tu vida. Puede requerir que dediques tiempo a meditar y conectar con tu ser interior. Puedes necesitar también ayuda externa (terapia, coaching, etc) para poder de verdad cuestionarte a ti mismo. Quizás necesites algo más, cada persona es un mundo. Pero ese es el cambio por el que merece la pena luchar, ya que es el que te permitirá ser la persona que de verdad quieres ser, alcanzar ese ser tu mismo que es el único «lugar» en dónde de verdad te puedes relajar y disfrutar, en tu propio ser.
¿Cómo son tus cambios? ¿Internos o sólo perfumería?
Escuchar podcast:
Mertxe Pasamontes
Comments
Hola a tod@s;
Es cierto que para cambiar de «verdad» hay que cambiarse a uno mismo pero……….¿quién está capacitado para cambiarse y que ventajas le proporciona el cambio?. La respuesta a estas cuestiones es realmente dificil.
Personalmente puedo decir que yo no busco un cambio interno «radical» o una manera de entender el mundo «distinta u opuesta» a mi visón actual.
Tampoco es que me encuentre orgulloso al 100€ del ser que «he autoconstruído» durante estos cuarentaylargos años, pero la verdad, me conformo con analizarme de cuando en cuando, reflexionar sobre lo que hago bien y lo que hago mal, ver como me relaciono con mi entorno e intentar mejorar en muchos aspectos que son susceptibles de mejora.
Pero repito, no me atrevo -o quizás no soy capaz-, o quizás no veo las ventajas de gestionar un cambio radicial sobre mi mismo.
un saludo y gracias por dejarme participar.
Esos cambios de los que hablas, son más radicales de lo que parecen Manuel, pues te llevan de donde estás a otro «lugar». Eso es el cambio.
Encuentro en tus ultimos post temas interesantes y que de verás te invitan a la reflexión y sin duda a conocer, dialogar y formar tu mundo interior.Imprescindible que conozcan esto nuestros niños a fin de fomentar nuevos seres humanos en el afán de construir un mundo mejor.Felicitaciones y un abrazo desde Huamachuco-Perú.
Interesante Merche, gracias.
Perdona! Mertxe!
¡Excelente! El cambio enw uno mismo es el primer secreto del éxito.