¿Tiene sentido lo que haces?

Hoy he leído una entrevista muy poética, de Jason Webster, un inglés que se vino a vivir a una masía del Penyagolosa que vive la vida de un modo tradicional, lentamente, incluso diría que con espíritu zen. Ha escrito un libro, La montaña sagrada hablando de su experiencia. Y comenta que le encantan los cuentos. Lo dice así:
Esos cuentos emergen de la tierra misma, ¡habla la tierra a través de los relatos! Bien lo intuye la lengua árabe: los vocablos relato y regar tienen una misma raíz. Un relato riega porque cultiva comunidad.
No se porqué motivo, eso me ha hecho recordar un cuento que publiqué hace más de un año es este Blog y que me ha apetecido rescatar para vosotros. Seguramente ya lo conocéis, pero como dice Webster, cada relato riega y en cada lectura se encuentra un visión diferente.
EL RECOLECTOR DE ESTRELLAS
Cierto día, caminando por la playa reparé en un hombre que se agachaba a cada momento, recogía algo de la arena y lo lanzaba al mar. Hacía lo mismo una y otra vez.
Tan pronto como me aproximé me di cuenta de que lo que el hombre levantaba eran estrellas de mar que las olas depositaban en la arena y una a una las arrojaba de nuevo al mar.
Intrigado, lo interrogué sobre lo que estaba haciendo, a lo que me respondió:
Estoy lanzando estas estrellas marinas nuevamente al océano. Como ves, la marea es baja y estas estrellas han quedado en la orilla si no las arrojo al mar morirán aquí por falta de oxígeno.
Entiendo, le dije, pero debe haber miles de estrellas de mar sobre la playa, no puedes lanzarlas a todas. Son demasiadas. Y quizás no te des cuenta de que esto sucede probablemente en cientos de playas a lo largo de la costa. ¿No estás haciendo algo que no tiene sentido?
El hombre sonrió, se inclinó y tomó una estrella marina y mientras la lanzaba de vuelta al mar me respondió:
¡Para ésta si lo tuvo!
¿Lanzas tú alguna estrella de vuelta al mar? ¿O sólo haces grandes cosas que tienen mucho sentido? Y para esa persona cercana, ¿crees que tendría sentido?
Mertxe Pasamontes
Comments
Indudablemente si hay un acto con sentido es lanzar estrellas a la mar. Un regalo a la vida es pasear cada mañana acompañado junto a mi cansino can. Por supuesto la estrella luce cuando paseas sin mas horizonte que un sendero rodeado de maleza, de sus múltiples sonidos envueltos en ese rubor silencioso que es como el de una caracola pero sin olas. Son los instantes del no tiempo.
El día tiene la suficiente holgura como para ampliar el lanzamiento de estrellas. Desde ese café con leche mojado en un croissant mientras observo los colores de un periódico deportivo. El cigarro acompasado por multitud de orondos círculos mientras observas el techo. Ese trabajo delicado en concentración cuasi poética. Una canción. Una siesta. Un libro. Un texto. Una mirada nocturna desde el jardín amacetado. Una mirada cómplice. Lavarse los dientes….Hacer un comida. Preparar una sorpresa. Ver una película…
Hay tantas estrellas que jamás podré lanzar que hasta esa pena en el no tiempo resulta una estrellada experiencia vital.
De los mas hermoso relatos que he disfrutado en las ultimas semanas mi apreciada amiga, vaya para usted, desde mi querida Venezuela, mis palabras de respeto y admiración por su trabajo. Un afetuoso y cordial saludo.
Hola! Precioso cuento, me ha encantado. Tienes un blog de lo más interesante. Te invito a pasarte por el mío, sobre desarrollo personal, salud y solidaridad, y si cabe, intercambiar impresiones. Un saludo.
http://www.itsmyownworld.wordpress.com
Muy bello relato el que compartiste, me hace acordar a las personas pobres cuando te estan pidiendo en la calle y alguien de pronto te dice “no se los puede ayudar a todos”, es cierto que no se los puede ayudar a todos pero si se puede brindar ayuda a ese que te lo esta pidiendo, esta accion no va a cambiar el mundo pero seguramente para esta persona el dia hoy ha cambiado su mundo, mejoro su día y renovo su esperanza.
http://melinabarcella.wordpress.com
Mi apreciada amiga, te solicito permiso para colocar en mi blog tu relato “El Recolector de Estrellas” de ser posible, con sus respectivas referencias a este espacio.
Muchas Gracias
Desde el blog de Nelson, Enhorabuena por este post.
Un Saludo.
Hola Mertxe.
Vengo del blog de Nelson, que no soy capaz de dejarle un comentario allí… 🙁
Me ha encantado tu historia. Ojalá más gente pensara así.
Besos a los dos!