¿Eres emocional o racional?

Cuando alguien nos pregunta ¿eres emocional o racional?, la mayoría tenemos bastante clara una respuesta. La mayoría de nosotros, solemos tener una tendencia a estar en el lado emocional o en el racional y esa tendencia nos acompaña más menos de manera estable a lo largo de nuestra vida. Es obvio que algunas situaciones son de por si más del lado emocional (como por ejemplo una boda) o del lado racional (como resolver un problema matemático). En esos casos todos tenderemos a inclinarnos más de ese lado, pero aún y así habrá diferencias individuales en la manera en que las vivimos. Habría una tercera característica, la tendencia instintiva, pero no la trataré en este artículo al ser menos frecuente y porque en muchas ocasiones se la pone del mismo lado que al emocional aunque no sea exactamente igual.
Ser racional
Las personas que están más en lado racional serían aquellas que le dan preponderancia al pensamiento sobre los sentimientos y emociones. No son obviamente personas que no sientan, pero prefieren actividades intelectuales, que exijan más pensar que sentir y en donde se puedan tomar decisiones en las que predomine el análisis racional. En general, elegirán trabajos en donde predomine el pensamiento, la investigación o el análisis. Aunque la realidad es que todo el cerebro funciona como una unidad, estarían más en contacto con el córtex, serían personas más analíticas, que utilizarían el análisis secuencial para resolver problemas y con más uso de la lógica.
No obstante, también hay personas aparentemente racionales que en realidad están reprimiendo sus emociones, que tratan de no sentir en exceso porque les resulta demasiado perturbador o doloroso.
Ser emocional
Las personas que están más en el lado emocional estarían más conectadas con su cerebro emocional, con los llamados centros primitivos (sistema límbico o cerebro emocional). Son personas que suelen tomar las decisiones teniendo más en cuenta cómo les hacen sentir que no usando un razonamiento lógico y que buscan estar más en la experiencia que en la cabeza. Como he dicho antes, no es que estas personas no piensen nunca de manera lógica, que por supuesto lo hacen, lo que sucede es que se suelen ver más arrastradas que las personas racionales por sus emociones.
En este caso también habría personas que exhiben una falsa emocionalidad, que creen de algún modo, a veces incosnciente, que lo emocional es un valor y pro tanto exhiben y magnifican sus emociones.
Consecuencias de ambas opciones
Ambas posturas son válidas para ir por la vida, pero cuanto más en el extremo de una de ellas estés, más problemas acabará causándote. Si eres muy racional, vas a vivir muy metido en tu cabeza, pero bastante lejos de tus emociones y de tu cuerpo. No estar en contacto con tus emociones y con el cuerpo te puede llevar a tomar decisiones que por muy lógicas que parezcan, luego descubras que en realidad no querías o no te apetecían. Porque estás alejado de la intuición y de la sabiduría que eso conlleva. También te puede ocasionar dificultades para empatizar con los demás de una manera sincera, pues en ocasiones no sabes qué hacer con las manifestaciones emocionales de los demás. También puede llevarte a somatizar las emociones que no consigues expresar. Y además, te estás perdiendo la maravilla del mundo emocional, que te puede dar muchas satisfacciones si te dejas tocar por él.
Si vives sumergido en el mundo emocional es posible que te tomes la vida demasiado a pecho, pues todo te afecta sobremanera. Cualquier cosa que te sucede es maravillosa y la disfrutas mucho o terrible y la padeces en exceso. No hay términos medios en tu vida. Eso te lleva a una montaña rusa emocional constante. También te dificulta olvidar las cosas que te suceden, pues al recordarlas con tanta carga emocional es como si las estuvieras reviviendo constantemente. Eso puede acabar conduciéndote a la ansiedad o a estados depresivos. Y a meterte en situaciones en las que preferirías no estar. Puedes tomar las decisiones de un modo demasiado impulsivo, sin sopesar adecuadamente las consecuencias que puedan tener.
Lograr el equilibrio
Como le digo siempre a mis clientes, todo es malo en exceso. Las personas tenemos tres centros: uno racional, uno emocional y uno instintivo, que se corresponden con las tres principales estructuras del cerebro. El estado ideal es aquel en el que los tres centros están compensados, en que ninguno sobresale de un modo especial. Esto es muy difícil de conseguir porque como te he explicado antes todos tenemos una tendencia. Pero lo que sí podemos lograr es mayor equilibrio. Es posible que uno de ellos sobresalga un poco, pero si los otros dos centros tienen suficiente espacio tampoco será algo que te cause demasiados problemas.
Por ello, el demasiado racional tiene que esforzarse por conectar más con sus emociones, con su sensibilidad y hacer actividades que se lo favorezcan. El demasiado emocional tiene que ir hacia su cabeza y moderar sus exabruptos emocionales. Todo eso se puede conseguir y yo he ayudado y ayudo a muchas personas a lograr ese objetivo. Suele ser más fácil hacerlo con alguien que te guíe porque has de luchar contra una tendencia que tu vives como natural y se van a producir resistencias. En realidad tú te sientes cómodo siendo como eres y muchas veces no ves la necesidad de cambiar. Yo, cuando trabajo con alguien, sé cuándo y cómo se van a producir esas resistencias y puedo esquivarlas más fácilmente.
El mindfulness y la práctica del yoga también ayudan a estar en ese estado de equilibrio mental, en ese punto en que la mente se observa a sí misma y se consigue una cierta neutralidad. No es que no se sientan las cosas, es que no te dejas arrastrar por ellas. No es que dejes de pensar, sino que no te quedas tan enredado en tus pensamientos.
Así que si te animas a buscar ese equilibrio ya sabes que puedo ayudarte. Y te puedo garantizar es que ese modo de vivir más equilibrado, aporta más y mejores experiencias y una mejor capacidad para tomar las decisiones que te lleven a vivir una vida más acorde con quién en realidad eres.
En mi curso Descubre tu pasión y cambia tu vida (Dueño de tus emociones, Capitán de tu destino) también encontrarás la manera de empezar a equilibrar esas tendencias. Descubrir quién eres y vivir más en consonancia contigo mismo. Y con más paz mental.
¿Te consideras más emocional o racional? ¿Haces algo para compensarlo?
Comments
Ahora entiendo mejor algunas fotos, siempre te comento cosas que tienen que ver con las «sensaciones» que me transmiten tus fotos
Interesante articulo, la inteligencia emocional y la inteligencia logica son 2 inteligencias que deberiamos desarrollar para ser seres mas completos, la mujer por lo general es mas emocional y el hombre mas sentimental..
Saludos
Según tu interesante artículo parece que en mí predomina el lado racional. Me encanta la lógica, filosofía, informática, etc. Pero últimamente he descubierto que mi parte emocional también puedo racionalizarla y disfrutar de esas sensaciones que hacen vibrar mi mente y me da «vidilla». La verdad es también realizo algo parecido a «rumiar» experiencias no muy agradables, pero con la idea de mejorar la respuesta en el futuro y la verdad es que lo consigo en buena medida como buen resiliente. 🙂
Gracias por compartirlo.