¿Estamos enganchados a las Redes Sociales?
Es bastante obvio que desde aproximadamente el año 2004 (fecha de la creación de Facebook), hemos asistido a una revolución en el uso de Internet. Y muchas voces dicen que estamos enganchados a las redes sociales. Es algo que ha sucedido en un período de tiempo realmente corto, ya que por citar dos ejemplos, Twitter es del 2006 y el primer Iphone del 2007. Estamos hablando pues de un cambio en la manera de comunicarnos acaecido a una velocidad nunca vista en la historia de la humanidad. Eso hace que sea difícil pronosticar hacia donde nos dirigimos.
En este breve lapso de tiempo hemos pasado de ser usuarios básicamente pasivos de Internet a ser creadores de contenidos. Cada vez que compartimos una foto o un pensamiento, o lo que estamos haciendo, estamos creando un contenido nuevo en la Red. Y además lo estamos haciendo con personas de cualquier parte del mundo, cosa que diez años atrás nos hubiera parecido muy improbable. Y, para rizar el rizo, gracias a los teléfonos inteligentes, lo podemos hacer desde casi cualquier lugar. Podemos decir sin equivocarnos, que estamos ante una revolución social sin precedentes. Y ante eso, es lógico que muchos usos y comportamientos no estén todavía demasiado claros.
Este nuevo tipo de comunicación tiene una serie de ventajas de las que muchos estamos disfrutando. Nos permite estar en contacto con personas que físicamente están lejos, conocer a gente que de otro modo hubiera sido impensable conocer, disfrutar de servicios y productos que antes no teníamos posibilidad de disfrutar, exponer nuestros propios servicios y productos a una gran audiencia, conocer las opiniones de los demás de primera mano, informarnos, participar…Varios estudios realizados nos muestran que Internet aumenta nuestra sociabilidad y ayuda a personas con dificultades sociales a relacionarse.
Pero no podemos olvidar que tiene sus desventajas y problemas. Los adolescentes son especialmente vulnerables en las Redes Sociales y ya se están dando casos de acoso sexual y bullying. El acoso por parte de los compañeros es algo que de algún modo siempre se ha dado pero ahora tiene el agravante de que se puede grabar un vídeo y subirlo a Youtube con lo que la humillación para el acosado es mayor. Y también sucede que como un adulto puede fácilmente engañar a un adolescente haciéndose pasar por otro, les es relativamente fácil conseguir alguna foto comprometida y acabar chantajeándo al menor confiado con ello. Por eso es importante con la gente más joven, una buena educación al respecto que evite caer en la demonización de las Redes pero advierta de los peligros que te puedes encontrar. Hay que educar en el uso correcto de las mismas. Y recordarles que si cuando están con un grupo de amigos, se pasan el rato todos mirando al móvil, se están perdiendo la presencia del otro y ese contacto cercano que ninguna red puede igualar.
De mismo modo los adultos pueden caer en una excesiva dependencia de las Redes y de los gadgets electrónicos. Se puede estar durante una cena con la pareja o amigos sin consultar el móvil y no se hunde el mundo. O durante un día en el campo. No es necesario estar todo el tiempo conectado y proponerse horas de desconexión es saludable (si no te salen de manera natural). Del mismo modo, no es imprescindible tener el último modelo de móvil o de tablet o de lo que sea. La tecnología debe estar a nuestro servicio y no nosotros al suyo. Y eso es algo que frecuentemente olvidamos.
El paso del tiempo y el uso nos ayudará a encontrar el patrón de uso más adecuado para cada uno de nosotros. No creo que en la mayoría de casos debamos preocuparnos por ello pues a la mayoría las Redes nos hacen más sociales, más empáticos, más solidarios. Como comenté en un post hace ya algún tiempo, no solemos estar enganchados a las Redes, sino a nuestros amigos. Queremos saber qué hacen, compartir lo que hacemos con ellos, reírnos juntos. Como en todo, lo mejor es que te observes, que te des cuenta de cuantas horas permaneces conectado, de si tienes dificultades para apagar el móvil, de si descuidas la relación presencial…Ser consciente de tu patrón de uso y sincero contigo mismo. Y con el tiempo y el uso iremos ajustándonos a este nuevo estilo de comunicación y relación. Y esperemos que al final, consigamos con todo esto una sociedad más humana y solidaria.
Me gustaría proponerte hoy: ¿Te atreves a poner en un comentario cuántas horas pasas al día conectado? ¿Crees que es mucho o poco?
Si quieres un buen móvil económico te dejo una recomendación y todos sus complementos:
– Xiaomi
-Tarjeta MicroSd
Mertxe Pasamontes
Comments
Aunque los adelantos tecnológicos se nos hacen casi imprescindibles para el día a día en, esta, la sociedad cosmopolita y moderna, no es menos cierto que una mala praxis y un mal uso……provocando abuso, es perjudicial y contraproducente.