Asumir el error
Adentrarse en un libro de Eduard Punset como es El viaje al poder de la mente siempre es una aventura fascinante. De manera sencilla, clara y directa te pone delante de aspectos de tu cerebro y por tanto de tu comportamiento, que a veces te sorprenden (otras te confirman lo que ya sospechabas) y que además viene avalados por estudios científicos.
En el capítulo 3 aborda el tema de por qué nos cuesta tanto cambiar de opinión. Otro día me centraré en cómo nos afecta eso en nuestras predicciones futuras pero hoy quiero hablar del coste del error. Ya comenté en un post anterior como el científico Pascual-Leone recomendaba que una vez tomada una decisión, era mejor olvidar las otras que hubieran podido tomarse pues era el modo en que nuestro cerebro mejor respondía al cambio, se aferraba a la nueva convicción de que habíamos hecho lo mejor. Paradójicamente esto nos lleva al efecto contrario: nos cuesta asumir los errores.
Porque aunque la pseudopsicología del «buenrrollismo» diga que no nos equivocamos, eso no es cierto. !Y tanto que nos equivocamos! Y además, muchas veces. Otra cosa diferente es que no podamos aprender de nuestros errores y transformar el fracaso en feedback. Pero lo que está claro es que cometemos errores. Y un «meta-error» es el hecho de no asumir el error cometido y pretender seguir adelante aunque sepamos que no es la decisión correcta por «el coste que ha tenido tomarla«.
Un ejemplo de coste del error que otras veces he utilizado pero creo que es sumamente clarificador es comprar unas entradas para el teatro. Te cuestan 25 euros cada una. Cuando llevas media hora de obra te das cuenta de que no te gusta nada, te aburre y no tiene visos de mejorar. Tu acompañante cabecea de aburrimiento. Pero como has pagado decides quedarte. Has pagados pues dos precios: el de las entradas y el del tiempo invertido en aburrirte.
Situaciones como estas hay muchas: seguir en una carrera que no te interesa porque ya has estudiado varios años (y sabes que nunca ejercerás de eso), continuar en un trabajo que detestas por lo que te costó entrar en él y aprender como iba, seguir manteniendo una inversión que se ha desvalorizado aunque te cueste dinero por no querer asumir la perdida, etc…
Cometemos errores. Cuanto antes asumamos lo errores cometidos, antes estaremos en disposición de aprender de la experiencia, superar las adversidades y encontrar una salida y «dejar de perder». Lo perdido, perdido está. Como dijo Edison: No he fracasado, he encontrado 99 maneras de no hacer una bombilla.
¿Asumes tus errores o te aferras a ellos para no tener que cambiar?
Mertxe Pasamontes
Comments
Mertxe, yo al menos estoy educado en la cultura de que no se pueden cometer errores. Y me ha costado muchísimo asumir que sí los cometo.
Ahora soy mucho más feliz, mucho más persona y entiendo mucho más a la gente. Sin embargo, seguimos en la cultura del éxito-fracaso, en eso hemos avanzado poco.
El año pasado decidí hacer un curso de diseño de páginas web. Aunque tengo trabajo fijo, soy diseñadora gráfica, decidí hacerlo porque los diseñadores web están mejor remunerados, con este curso podría plantearme cambiar de empresa, quizás a una mejor y ganar más dinero.
El curso me costó 850 Euros, 4 horas semanales desde octubre hasta abril, 90h en total.
A medida que el curso avanzaba, cada vez se me hacía más pesado, no me enteraba muy bien o nada de algunas explicaciones, quizás muy avanzadas para mi, y poco a poco me fuí desmotivando y el ir a las clases era un suplicio para mi. Me equivoqué, me gasté el dinero, invertí mis horas, la gasolina del coche en los traslados, y 90h en las que procuraba atender y comprender algo que ahora sé que no me gusta ni manejo bien.
En resumen todavía estoy asumiendo interiormente el error, superarlo, pero la verdad es que me fastidia mucho que el esfuerzo no haya tenido ningún sentido.
Mi dilema es si voy a sacarle partido ahora, practicando en casa, aunque no disponga mucho tiempo ni ganas, o abandonar este idea de convertirme en un profesional mejor remunerado definitivamente.
A veces creo que no sólo es asumir el error, sino basarse en las espectativas de cada uno.
Te marcas una meta, y si no llegas lo asumes como un fracaso y no como un error.
Por lo que dice Edison, erró, si, pero consiguió su meta, abandonar el propósito hubiera sido un fracaso y no un error.
Error lo entiendo como los problemas irreversibles que vamos superando para conseguir lo que buscamos. Si abandonamos, hemos fracasado catastróficamente, aunque siempre habremos aprendido algo.
Un saludo.
.-= Ahora mismo, en el blog de Vicente Alfonso: 500px =-.
Eso mismo pasa a mucha gente que empieza a leer un libro, no le gusta, y a pesar de todo lo termina, porque dicen que «yo siempre acabo lo que empiezo» y cosas así. En psicología, la negativa a abandonar un proyecto inútil en que se ha invertido una cantidad de dinero se denomina «error del coste invertido». Es una forma extrema de coherencia fuera de lugar. Nuestra incapacidad de reconocer nuestros propios errores, ni siquiera ante nosotros mismos, es una de las causas fundamentales de la irracionalidad.
.-= Ahora mismo, en el blog de Gonzalo Álvarez Marañón: Nueva legislación para presentaciones =-.
Muy bien Mertxe… me gusta la reflexión. Yo trato de asumir el error de mis decisiones con «deportividad» y, como tu dices, lo mejor es aprender de ellos. Siempre digo que tomé la decisión correcta en base a la información de la que disponía en ese momento, así que no cabe arrepentimiento… que ya sé que no es la palabra adecuada, pero por ahí va (sinceramente no me sale la palabra para definir esa sensación).
Muy buen post. La culpa de este tipo de problemas es la congruencia con nosotros mismos.
Nos gusta pensar que somos 100% congruentes siempre, y que no cambiamos ni un ápice en función de las situaciones o los problemas que surjan, y esto nos cierra el camino para asumir el error.
¿La clave? Como tantas otras veces, ver otros puntos de vista.
Un saludo.
Es increíble pero un a diario vemos una cantidad enorme de gente que se encuentra en esta situación de: No admisión del error de haber escogido una carrera que no amamos, pero seguimos en ella por ciertas razones como las citadas en el artículo.
«Hay tantas profesiones como novios/as posibles, pero sólo te enamorarás de uno/a»
Los errores viven con cada uno de nosotros,seria mas fácil si no te gusta la obra de teatro salirte de ella, que no pensar en coste de la entrada,y como esto montones de cosas las hacemos como rutina pero que pocas enmendamos. Todo tiene un coste ,cambiar de vida o de trabajo trae dudas,pero se debe tener valor,la vida es muy corta y cuando quieres darte cuenta se pasó.
Eduard Punset me gusta como escribe y las cosas que me enseña pero me gustaría tenerle delante a solas y poder preguntarle si ha vivido su vida como ha querido,o se limitó a descubrimientos muy grandes para dejarlos para las historia.