Aprender a usar la intuición
No es la primera vez que hablo en este Blog sobre las decisiones intuitivas y el enorme papel que juega el inconsciente en la toma de decisiones. Insisto, en que cuando hablamos de inconsciente, no lo estamos haciendo en un sentido freudiano de lugar mental de los deseos reprimidos, sino de toda aquella información que procesamos sin participación activa de los mecanismos conscientes. En el anterior post sobre el modo de decidir, ya comenté que investigadores como Pascual-Leone nos definen como tremendamente irracionales. Y Joaquín Fuster, experto en neurociencia cognitiva, en entrevista concedida a la Contra, vuelve a insistir en los mismos aspectos de nuestra irracionalidad y en la importancia del pensamiento intuitivo. Veamos que dice:
De hecho, tenemos muchas memorias. La intuición, por ejemplo, es una forma de memoria inconsciente. La corazonada es un acto ejecutivo sin razonamiento lógico consciente, pero profundo y fundado.
¿Las hormonas superiores?
Exacto, que nos advierten lo que debemos hacer y no se equivocan; esto es memoria, es percepción inconsciente. Y también es la base de otra cosa: la sabiduría.
¿La sabiduría es inconsciente?
Sí, la sabiduría es también memoria, mucha de ella intuitiva y mucho más estable que las otras memorias. No te acuerdas de la fecha ni de la cara ni del nombre, pero sí de ciertos hechos fundamentales.
Como ya hemos comentado, se calcula que el inconsciente procesa entre 7 y 11 Millones de bits por segundo mientras que la conciencia, funcionando a tope tiene capacidad de procesar 50 bits. Es obvio entonces que gran parte del procesamiento no está al alcance de nuestra conciencia, no tiene la capacidad de hacerlo. La racionalidad está sobrevalorada, posiblemente por un tema cultural (la influencia del Cogito, ergo sum de Descartes) y por el hecho de que cuando pensamos sólo podemos ser conscientes de la «parte consciente». Se que suena redundante, pero es que nuestro funcionamiento es también redundante.
Recientes investigaciones (enlace al programa completo) como la llevada a cabo por Gerd Gigerenzer psicólogo del Instituto Max Planck de Berlín, nos demuestran que muchas decisiones son más efectivas tomadas con pocos datos pero consistentes, que con múltiples datos. El cerebro no se maneja bien con gran cantidad de datos y lo hace muy bien con uno o dos datos. Eso no quiere decir tomar decisiones de cualquier manera, decidir lo primero que se nos ocurra, sino que tener un par de buenas razones de carácter intuitivo es incluso más efectivo que disponer de una lista exhaustiva.
No por ello hemos de dejar de hacer un análisis racional de una situación, pero sí que no debemos caer en la parálisis del análisis. Siempre habrá un momento en que analizados los datos, tendremos que inclinarnos por una opción u otra. Si las opciones son múltiples, podemos tratar de reducirlas racionalmente a dos y llegados a ese punto dejarnos llevar por la intuición. Es un buen modo de aprovechar lo mejor de nuestras dos mentes. Ya expliqué en este post de cómo tomar la mejor decisión, una manera de hacerlo que aunque se llama puente al futuro, no deja de ser un modo de ponernos más en contacto con nuestra intuición. Y si no sabes cómo hacerlo solo, una buena sesión de coaching siempre puede ayudarte. 😉
Puede suponer una herida a nuestro ego pensar que somos tan irracionales, pero mejor saberlo para poderlo usar en nuestro favor, en lugar de en nuestra contra.
¿Crees que tomas tus decisiones de un modo racional? ¿Qué papel juega la intuición en ellas?
Mertxe Pasamontes
Comments
Todas las decisiones son racionales, no hay ninguna irracional. Cuando tomas una de estas ‘irracionales’, lo que estás haciendo es utilizar una válvula de escape porque hay demasiado ‘raciocinio’ en tus actos.
Tengo una amiga que lo dejó todo y se fue a Sto Domingo a trabajar. Allí tuvo un hijo, regresó a España y hace poco volvió allí. Vive en una chabola. ¿Es irracional su decisión? No, está claro que ‘irracional’ es subjetivo.
Sin duda creo que el principal motivo de nuestra falta de «irracionalidad» es decir, usar nuestro subconsciente, instinto, corazonadas… llamémosle como queramos; es la formación y cultura occidental. Es otro claro ejemplo, de como nuestra cultura y progreso se ha enfocado en un sólo plano de nuestro ser, olvidando por completo que somos seres complejos y globales.
¡Cuanto de tenemos que reaprender de otras culturas o tiempos!
.-= Ahora mismo, en el blog de Fernando: Motivación en el aula =-.
Joaquín Fuster, el genio de nuestra mente,que papel juega en mi persona increíble pues me dejo llevar casi siempre por ella,debería reflexionar quizás un poco mas las cosas,pero no me doy cuenta y ya he abierto la boca o escrito lo me dictaba en ese momento mi intuición.
realmente me sirvió de mucho para frenarme un poco unas sesiones de
coaching ,pues ahora logro dominarme mucho mas.
Y las cosas me salen mejor.
Cómo saber si estoy tomando una decisión por una corazonada, o si sólo me estoy saboteando de manera inconciente una buena decisión porque creo que tengo una corazonada.
No es fácil saberlo, se ha de sentir. Y para eso hay que conocerse, hay que reconocer los mecanismos que usamos para sabotearnos y cuando si embargo, estamos frente a una decisión que nos surge de lo más aprofundo.
amiga como estas
yo tengo novio pero él, el 30 de julio me dijo que iba a tener un hijo con otra persona yo no lo podia ni ver hablamos y decidimos darnos una segunda oportunidad luego yo he comenzado a analizar la situacion y llegue a enviarle una carta pues para terminar pero salimos hablamos y otra vez estamos juntos usted cree que hice lo correcto aunque yo siento que el no me dice las cosas
Tendría que tener más datos Verónica, pero de entrada el tema se ve complicado.