No es nuevo el hecho de que muchas veces la felicidad está en las pequeñas cosas. Es algo de lo que se ha hablado ampliamente y filosofías como la que propugna la corriente del downshifting (se podría traducir como
Ya comenté en la anterior entrada que me había dejado una parte interesante de la cual hablar: cómo muchas veces somos nosotros mismos los que nos metemos en situaciones que nos conducen a la depresión.
Nos dice Josep López: