¿Síndrome postvacacional?
Uno de los tópicos de estas fechas es el manido síndrome postvacional. No es un síndrome aceptado dentro de la psicopatología, pero sí a nivel clínico, aunque sea como una manera de clasificar fácilmente una serie de síntomas que presentan algunas personas a su vuelta al trabajo tras las vacaciones. Estos síntomas podrían clasificarse como un estado depresivo leve y transitorio, con cansancio, apatía, desmotivación, insomnio, etc… Síntomas que remiten por si solos y que en la mayoría de casos no requieren ningún tratamiento específico.
Sin entrar a discutir en la validez o no del síndrome o si es una manera más de patologizar las reacciones normales de las personas, lo que está claro es que muchas personas experimentan diversos grados de desazón con la vuelta al trabajo. Y este año, con la complicada situación económica y laboral, se prevé aún más complicado que otros.
Antes de continuar, os dejo con unas reflexiones de Luis Miñarro, productor y director de cine, cofundador de los cineclubs Arts y Mirador, en la entrevista que le hacen en la Contra :
Creo que toda acción queda impresa en el aire que respiramos, que las guerras y la violencia nos llega a todos, porque somos conductores de todo, somos agua.
Básicamente, cierto.
Todo queda, lo bueno y lo malo. Cuanto más sufrimiento, aunque sea en aquel país lejano, más difícil será librarnos de las cargas porque somos un colectivo. Lo importante al final es que lo que hagas esté hecho con pasión.
Igual el problema es “tener que ganarse la vida”.
Lo importante es ser, y tener conciencia del valor de la vida que es lo único que tenemos y que podríamos estar gozando al máximo; todo lo demás, incluidas mis películas, es superfluo.
Las palabras de Miñarro, dan algunas claves para “una vuelta feliz”:
– Hacer algo que te guste, en lo que pongas pasión. Se que muchos me dirán, si claro, pero tengo que vivir aunque mi trabajo me desagrade. Bien, entonces tienes dos opciones: cambiar lo que haces que no te gusta o rebajar tus expectativas de disfrutar con tu trabajo. Tú decides.
– Rebajar tus “necesidades”. ¿Cuánto de lo que tienes te es realmente imprescindible? ¿Cuánto esfuerzo te cuesta “pagarlo?
– Cultivar tu “mundo interior”. Hay muchísimas maneras de hacerlo (meditar, leer, estudiar, dar rienda suelta a tu creatividad….), elige la que más se adecue a tu personalidad y gustos.
– Fomentar tus relaciones sociales. Cada vez está más demostrado, que las personas que tiene mejores relaciones sociales, son más felices (e incluso viven más años).
– Disfrutar del aquí y ahora. No es necesario esperar a pasarlo pasar bien en vacaciones.
Y lo mejor es que prácticamente todo está en tu mano, depende de ti. ¿Sufres el síndrome postvacacional? ¿Qué estás dispuesto a hacer para evitarlo?
Mertxe Pasamontes
Comments
Yo creo que ese síndrome postvacacional no es otra cosa que el cambio de un estado de relajación no sujeto a horarios, a responsabilidades, a cambio de ambiente, etc. a la situación de volver a trabajar, donde hay un horario, un trabajo que sacar adelante, etc. unido todo ello al gasto económico de las vacaciones con el comienzo del curso escolar.
A todos o casi,les cuesta volver a coger el ritmo después de las vacaciones ,este año con motivo de la crisis la gente ha tenido que conformase con un máximo de una semana y eso hará que el regreso será menos duro.
He leído el comentario de Torero_31 y no estoy del todo de acuerdo con el. Cuando tienes vacaciones de todo un mes al volver hay muchas personas a las que les cuesta mucho adaptarse otra vez al trabajo ,antes había incluso bajas laborables debido a ello, aunque creo que este 2009 no sucederá nada de esto.
De todas formas la mente juega mucho en estos casos, como en casi en todo.
¿Existe el sindrome post-laboral?.
Idem, pero simétrico al vacacional. Sentirse mal cuando acaba el trabajo y te incorporas a las vacaciones.
O peor aun sentirse mal cuando se acaba el trabajo y te incorporas al paro.
Parece que en estos tiempos de modernidad la tristeza no esta de moda, el sentirse postdeprimido es una enfermedad mental. No ser creativo y vital como que da mal rollo mientras la enfermedad se oculta en pañuelos africanos.
El éxtasis de la arruga no solo esta arrugada además es un estigma a lo que es maravilloso y total, cosa de indígenas pasados de tanto fumar pipas de la paz.
Si no tienes marcas que eres? impersonal?.
Parado con pesadillas pues no se puede parar. Que diría mi abuelo? el de las peonadas y los mendrugos de pan siempre contando chistes.
Pastillas para la apatía que parece ser una anomalía.
Como si la guerra no fuera la hermana gemela de la paz o la tristeza del payaso su felicidad.
A mi ir al paro jamas me sento mal, todo lo contrario son los mas maravllosos espacios de libertad. Aunque por lo visto la media general me lo recuerda por si estuviera equivocado, o de tanto repetirlo se hacer realidad.
Esta vez pregunto yo – Interpretas sonidos o arpegias silencios?, retozando a las sombras de la luz.
El hecho de tener que trabajar, sobre todo si el trabajo que haces no te interesa un pimiento, te impide hacer cosas que realmente te gustan y te llenan o simplemente disponer de tu tiempo, que es bien tuyo y de nadie más. El problema está en que hay que comer, pagar la hipoteca y dar una educación a tus hijos, que no es, ni mucho menos, gratuita. No hay más remedio que trabajar, te guste o no. El síndrome postvacacional no es ninguna patología. Es completamente natural. Es la tendencia a vivir en la tranquilidad del ocio, en el derecho de disponer de tu vida como a ti te parezca, realizando otro tipo de actividades más enriquecedoras para ti, saliéndote de la espantosa rueda del estrés y la competitividad laboral.