¿Tienes miedo a envejecer?

Marie de Hennezel, psicóloga y psicoterapeuta ha escrito un libro titulado La suerte de envejecer bien que ya está siendo un éxito de ventas. En él aborda temas de esos que aunque «importantes» parecen no estar de moda en nuestra sociedad del culto a la juventud. En la entrevista que le realizan en La Contra explica cuál es su visión de proceso de «envejecimiento» y cuál puede ser la mejor actitud para enfrentarse a esa etapa de la vida, que si tenemos la suerte de llegar a vivir, supondrá un cambio importante en cuanto a cosas que podemos hacer y cosas que no (no existe el elixir de la juventud, aunque algunos intenten venderlo!).
Algunos consejos pueden parecer obvios, pero no creo que eso los haga más fáciles de seguir. De algún modo, Marie, está poniendo el dedo en la llaga de muchos de los males que vivimos: ¿hacia dónde vives? ¿hacia adentro o hacia fuera?.
Es obvio, como dije en el post sobre prevenir el Alzheimer, que es necesario tener relaciones sociales y «hacer cosas». Tanto como es necesario entrenar cuerpo y mente (Fitness físico y mental) para mantenerse en forma. Pero tan importante como esto es cultivar una cierta actitud interior. Marie de Hennezel nos sugiere algunos modos de hacerlo como meditar, aprender a disfrutar de los placeres pequeños y sobre todo, mantener el contacto con nuestro propio corazón, mantener ese amor por la vida que es lo que verdaderamente nos mantiene jóvenes. Mientras exista ilusión y amor por vivir cada momento con toda su intensidad ( y eso no depende de lo que estemos haciendo, sino de una actitud interior), el corazón permanece joven.
Todo ello me ha hecho pensar en un cuento que ya posteé en su día, pero que me voy a permitir repetir, porque creo que realmente viene como anillo al dedo.
Todas las preguntas que se suscitaron aquel día en la reunión pública estaban referidas a la vida más allá de la muerte.
El Maestro se limitaba a sonreír sin dar una solo respuesta.
Cuando, más tarde, los discípulos le preguntaron por qué se había mostrado tan evasivo, él replicó: “¿No habeis observado que los que no saben qué hacer con esta vida son precisamente los que más desean otra vida que dure eternamente?”.
“Pero ¿hay vida después de la muerte o no la hay?”, insistió un discípulo.
“¿Hay vida antes de la muerte? ¡Esta es la cuestión!”, replico enigmáticamente el Maestro.
Y con esa misma pregunta que formuló el maestro os dejo: ¿estás viviendo la vida plenamente? ¿piensas que tu corazón es y seguirá siendo joven? ¿te levantas cada día con ilusión por disfrutar de los instantes que la vida te depare?¿te da miedo envejecer?
Mertxe Pasamontes
Comments
Mucha gente piensa que la juventud pasa por lo puramente escenográfico. Salir, fumar canutos, colgarse una guitarra, comprarse una moto. Y es así.
Felicitaciones por tu artículo.
Saber envejecer es la obra maestra de la vida, y una de las cosas más difíciles en el dificilísimo arte de la vida.
AMIEL, Henri Frédéric
El arte de envejecer es el arte de conservar alguna esperanza.
MAUROIS, André
No temo envejecer pues ya soy mayor,y creo que es bueno pensar que he llegado hasta aqui,
pero temo la enfermedad, eso me da terror ,perder mi propio control si es que me doy cuenta,
tu articulo manigfico ,gracias Merche
Envejecer cronologica, fisiologica o mentalmente, es lo que hay que preguntarse. Cuantos jovenes son viejos desde niños. Al joven se le dice viejo y al adulto mayor se le dice joven. Las celulas envejecen, los organos se desgastan y el cerebro se altera mas de lo que ya esta, es irreversible; los pensamientos se añejan y el futuro aunque prometedor se acorta. Miedo al envejecimiento aun siendo joven es lo que debia temerse realmente. Cero, veinte, cuarenta, sesenta, ochenta, cien: es la unica cuenta por saldar a Dios o a otro ser superior o divinidad etereas, ¿alquien lo sabra alguna vez?