Resistirse al cambio o avanzar

De alguna manera en este blog, estoy hablando casi siempre de la resistencia al cambio y de los diferentes modos de evitar quedarte anclado en lo mismo de siempre, repitiendo esquemas y conductas. Una de mis maneras favoritas de prepararse para esos cambios es ampliar el mapa mental, pensar fuera del marco, ya que cuando lo hacemos, en un nivel de nuestra mente estamos empezando a generar nuevas opciones y eso es indispensable para que en un momento posterior podamos realizar las acciones que producirán esos cambios. Porque lo que hemos de tener claro, lo que resulta inevitable como ya he comentado algunas veces, es pasar a la acción. Los cambios no podemos hacerlos «solo en la cabeza». Eso no son cambios verdaderos, son ilusiones de cambio o incluso autoengaños, ya que nos consolamos en ese «pensar en el cambio» cuando en realidad no estamos haciendo nada.
Pero la resistencia es normal y forma parte de nuestra vida, nos guste o no, la queramos reconocer o la neguemos. Porque lo que sí que os puedo asegurar es que muchas veces negamos estar resistiéndonos, es algo que observo frecuentemente en el marco privilegiado de las sesiones de terapia y coaching. Y en la vida cotidiana también lo veo, pero las sesiones te dan un contexto con más información para poder ver con claridad que has topado con una resistencia. Hay profesionales que opinan que la resistencia es un problema del terapeuta, de no saber llevar a la persona más allá. Yo no estoy de acuerdo con eso. Puede haber casos en que el terapeuta se atasca y no sabe cómo hacerlo, es cierto. Pero también es verdad que resulta casi imposible llevar a la persona a un lugar al que no quiere ir o al que no está preparada para ir.
Bajar la resistencia y cambiar te supone enfrentarte a cosas que tal vez no quieras ver, te obliga a tomar decisiones incómodas y a transitar caminos en los que no te sientes seguro. Es la única manera de descubrir nuevos recursos en ti y de verdad encontrarte contigo mismo, con tu yo más auténtico. Pero como es un camino duro no es de extrañar que no todas las personas estén dispuestas a hacerlo y que como dice Osho: Sólo una mente abierta puede estar preparada para escuchar algo que va en su contra. Una mente cerrada puede escuchar sólo lo que la respalda.
Y a veces en ese proceso, te vuelves contra la persona que te está mostrando esa resistencia. Como dice Carlos Castaneda (Una realidad aparte): “A los seres humanos les encanta que les digan lo que deben hacer, pero aún les gusta más luchar y resistirse a hacer lo que se les dice; y de este modo se enredan en aborrecer a quien los ha aconsejado” . En ese volverse contra el que te lo dice, la persona encuentra un modo de enfrentar el miedo al cambio y «echar la culpa a otro», se queda tranquila y puede volver a su zona de confort, a su zona de seguridad. Y así seguir el resto de su vida, dando vueltas y vueltas y creyendo que avanza mucho en el camino.
Yo os sugiero dar la bienvenida a aquellos que os sacuden hasta los cimientos. Son personas que nos brindan ocasiones de oro para aprender y crecer. Oportunidades para pasar por fin de nivel. Como siempre, tú eliges, pero recuerda las palabras de Herbert Agar : La verdad que hace libres a los hombres es, en su mayor parte, la verdad que los hombres prefieren no escuchar.
¿Te resistes al cambio? ¿está seguro de eso?
Si quieres escuchar el post en formato podcast clicka en el reproductor:
Comments
Enhorabuena, Mertxe. Gran Post. Totalmente de acuerdo. La paradoja es que la zona de confort de muchas personas les resulta «dolorosa» pero siguen sin hacer nada para mejorar por esa resistencia al propio cambio que tan claramente has explicado.
Parece como si estuviera escrito en nuestro código genético. Queremos grandes cambios, pero en los demás. Encontramos mil justificaciones para la frase «Lo mío no se toca».
Los próximos meses van a ser apasionantes porque nuestra «zona cómoda» va a seguir calentándose. Probablemente, se calentará tanto que no podremos seguir sentados en ella.
Gracias por el análisis. Ojalá que mucha gente lo lea y lo aproveche.
(Por cierto, mira en tu wordpress el plugin CommentLuv, que está avisando de que necesita actualización)
Excelente post Mertxe. ¿Qué es la vida sino un cambio contínuo? Por lo que resistirse al cambio es lo mismo que «no vivir». Muchas personas se justifican o esperan y esperan la anhelada estabilidad para decidirse a dar el paso definitivo hacia sus sueños, cuando no han entendido que la estabilidad, comprendida como algo inmóvil, no existe.
Un abrazo!
Hola Mertxe,
Sólo diré dos palabras: absolutamente cierto!.
Que pases un buen día y no dejes de escribir, a mí personalmente, me ayuda mucho a verlo en palabras, no sólamente escucharlo.
Veo que todos lo que habéis comentado estáis de acuerdo en que hay que atreverse a cambiar. Me asalta una duda: ¿piensa mucha gente así o los que piensan lo contrario no se atreven a comentar?
En realidad siempre estamos en proceso de cambio. Cuando hablamos de «El Cambio», todos estamos de acuerdo en que es necesario, pero, como indicas en el post, ponemos más empeño en autojustificarnos para no cambiar.
Al contrario de lo que pensamos, somo animales bastante irracionales, y decimos unas cosas pero hacemos otras.
Lo importante es encontrar el detonante que nos ayude a salir de la zona de confort.
Por desgracia, en estos tiempos ese detonante suele ser una patada o un empujón. Da igual, si nos pone en el camino, bienvenido sea.
Un saludo,
celestino Martínez.
Permíteme felicitarte y felicitarme por la excelencia del mensaje y ser tu suscriptor.Que importante es saber que tienes que salir de tu zona de confort, para acariciar la vida, ser tu tu camino emponderado necesario y suficiente a que la felicidad es el medio no el fin.Un abrazo desde Huamachuco-Perú.
Viva el cambio! No es fácil prepararse para él, pero en el fondo todos sabemos y sentimos que lo necesitamos cuando lo necesitamos, pero muchas veces, la mayoría por falta de valor o seguridad intentamos negar la necesidad de cambiar, o excusarnos en algo.
Maravilloso! cada vez más personas que se suman a ese cambio, a ese riesgo, a ese estar vivos…
Me impresionas. Me gusta lo que escribies. Me recuerda cosas que he «vivido», y que en su momento llegué a pensar que mucha gente no las compartía… siendo así el «diferente». Parece que busque aquí mi grupo de pertinencia, sería exagerado, pero si que cabe decir que me alegra tener una sintonía de pensamiento acorde con tus escritos.
Saludos
Me ha encantado el artículo, y me deja con tarea para pensar: sinceramente no se si «estoy preparada para escuchar algo que va en mi contra»… pero prometo prepararme.
Hola Mertxe,
Me encanta tu blog. Es un placer leerte y encuentro tu blog reconfortante frente a tanta basura en los medios en general.
Como dices, creo que es normal resistirse a los cambios. Lo veo muy relacionado con otro post tuyo donde hablabas de si la vida es tu propio guión o el que te han dictado.
En mi caso el agente de cambio han sido situaciones no deseadas a las que me he visto enfrentada, que dieron por tierra con mi zona de certezas, seguridades y respuestas automáticas, y me llevaron a través de un camino bastante doloroso a reencontrarme con un yo más desnudo y esencial. es decir no fue que me di cuenta racionalmente que me resistía al cambio. Cuando me resistía no me daba cuenta conscientemente y hubiese jurado que estaba abierta a cualquier novedad. me imagino que si se puede ir haciendo el cambio más suavemenente es menos doloroso que si lo haces forzado por circunstancias externas.
Un beso
Vuestros comentarios me emocionan, se siente la fuerza de la vida en ellos. Es bello poder ser testigo de esos cambios, aunque sea en la distancia. Gracias.
Mertxe comenta:
Veo que todos lo que habéis comentado estáis de acuerdo en que hay que atreverse a cambiar. Me asalta una duda: ¿piensa mucha gente así o los que piensan lo contrario no se atreven a comentar?
mi pregunta es….¿todos los que comentan a favor del cambio…lo aplican?
yo pongo mi experiencia:
vivia en Italia,he conocido a una Española,he vivido con ella entre Italia y España unos años y….he dejado todo en Italia y ahora vivo en España hace ya 6 años…he dejado amigos,familia y trabajo,luchando contra todos los comentarios de todos los seres que conocia!!!
ese es un cambio?
quien habla de cambio…lo emprende o solo comenta cuanto le gustaria cambiar?
ps:desde hace unas 12 semanas he empezado unas sesiones de coaching.
otro cambio.
antes exterior,ahora interior.
Hola Lorenzo,
quien habla de cambio…lo emprende o solo comenta cuanto le gustaria cambiar?
Yo soy argentina y vivo en España hace 9 años. Pero en realidad cuando escribí mi comentario no me refería a ese cambio, que fue importante pero más en el terreno del hacer. Empezar de nuevo etc, etc.
Mi experiencia de cambio profundo, interior fue a raiz de la muerte de mi hija Guadalupe que nació muy prematuramente y vivió 7 meses en la UVI. Fue muy doloroso, pero creo que hizo que tanto mi marido como yo cambiáramos a mejor. Estoy convencida de que hoy soy mejor madre, compañera y persona y que es un homenaje que siento que le debo a mi hija que vivió 7 meses y me enseñó un montón de cosas. Tuve por suerte la ayuda de una analista argentina, ya que esto sucedió hace 17 años cdo todavía vivía allí.
Bueno, espero no entristecer a los sensibles que lean, pero sepan que hoy estoy feliz y que tengo un marido y 2 hijos maravillosos, Lucas y Nacho.
Un beso. Y gracias a ti Merche, que tienes este espacio para compartir experiencias.
Lorenzo, cada uno tiene su proceso. Todos tienen un sentido en sí mismos.
Paula, gracias por explicarnos una experiencia personal tan íntima. Es una muestra de cómo la vida nos enseña.
He leído con mucho gusto este post y estoy en sintonía con él «casi» totalmente. Soy una mujer de 52 años que necesité un cambio hace muchos años.Interiormente lo sabía, me rebelaba contra lo que yo pensaba no podía cambiar, me sentía no válida, sin armas para hacerlo y poco a poco dejé que se apoderara de mí. Caí en profundas depresiones y en un sin fin de psicólogos y otras terapias, siempre queriendo mi bienestar y moviéndome para ello.Para amortiguar esos miedos, ansiedad, etc…entré en un sin fin de ansiolíticos, antidepresivos y demás, ahora veo que como mucho adormecian mi rebeldía interior, pero pasado un tiempo, volvía a recaer.Pero( y este pero es bueno)Coincidió una de las recaídas más fuertes que he tenido, con mi comienzo de terapia gestalt y con algo muy doloroso también como madre: mi hijo de 15 años tuvo un linfoma, durante 2006, él fue sanando con algo tan duro como es una quimio y yo a la vez que él con mis terapias.Los dos ahora estamos sanos y con una vitalidad extra. Y yo por fin escuché en mi interior que el único cambio que necesitaba era creer en mí y valorarme. ¿El por qué me sirvió la gestalt?básicamente porque está basada en el «darse cuenta», el respeto al interior de cada uno y el andar en ello sin juzgar, respetando, sin decirme hacia donde «debía» ir,descubrirme, algo que no pude hacer hasta entonces porque el resto de terapias me querían dirigir hacia donde mi interior no quería. Hubo personas que intentaron «abrirme los ojos», pero siempre desde el daño que les hacía a ellos con mi malestar y por eso el «casi»de arriba en cuanto a estar de acuerdo con todo lo que expones aquí.
En este camino perdí al hombre con el que compartí vida durante 30 años, él se resistió a mi cambió y decidió vivir en solitario, espero que algún día decida hacer los suyos, ahora somos amigos y yo sigo siendo YO.
Valiente testimonio Akina. Felicidades por tu cambio y tu encuentro con tu verdadero Yo.
Hola de nuevo,
Descubrí tu blog hace poco tiempo pero lo sigo desde entonces porque es muy estimulante, te hace avanzar, plantearte cosas. Ya comenté que decidí hace algún tiempo cambiar mi vida esperada por la que yo quería de verdad. No siempre entendida y mucho menos apoyada en un camino solitario y difícil, pero con altibajos porque llegar es difícil, soy mucho más yo y me siento feliz, y si algun día lo consigo ni te cuento. De todos modos, la decisión, el intento, ya mereció la pena. Hoy encontré esta pequeña joya, simple y grandiosa a la vez y lloré a rabiar porque me sentí muy identificada.
Quiero compartirla con vosotros y que ayude a los indecisos a iniciar ese cambio, ese gran viaje que ya de por sí es una recompensa.
Espero que os guste,
http://www.youtube.com/watch?v=A2iq8VEP6go
Hola, pasaba por aqui y derepente ví una pequeña historia en mi vida, el miedo al cambio, el estancamiendo…No sé que camino escoger, aunque tengo varias posibilidades. Creo que lo único positivo que tengo en este momento es que mis pensamientos no son negativos o eso creo yo. Aún soy joven, tengo salud, yo puedo cambiar!!! sólo es intentarlo!!! pero también me da miedo el fracaso. En definitiva, que es lo que me paraliza? el miedo… no quiero pensar que soy una cobarde, eso todavía tiene arreglo,estoy viva. Pero en estos tiempos de soledad, por los que estoy atravesando, encuentro un cambio que aún me da más miedo, a pesar de tanto verlo, es el miedo a la muerte. Ese cambio tan importante en una vida, en el que me dicen que deje de pensar. Que bonito sería aceptar los cambios. Gracias por leerme y por comprenderme, un abrazo desde la distancia.
Hola Paula
Es normal tener miedo al cambio, forma parte de nuestro equipamiento genético, de nuestro sistema de protección. Pero a veces hay que atreverse y lanzarse para poder avanzar. Gracias por pasar!
Hola.
Me ha encantado escucharte y me llaman la atención las respuestas de fortaleza y valentía ante el cambio.
Yo me identifico con una fuerte resistencia al cambio, que sé que me limita. Me cuesta el cambio, ya sea este pequeño, y más si es grande. Me tambalean por dentro las decisiones y siento mucha ansiedad ante los cambios, reconozco que no sé enfrentarme mejor a ellos y esto me hace sufrir y me coarta libertad ante la vida.
Reflexionaré sobre lo leído y escuchado que me pueda ayudar.
Gracias.